sábado, 22 de noviembre de 2008

[Game Over]




Es tan difícil tratar de plasmar toda una vida en un discurso, un pedazo de camisa, un video, una foto. Es difícil, en momentos como estos cuando nadie pueda luchar contra el recuerdo, encontrar la manera precisa de expresar la cantidad de emociones que se sienten al vivir, sin siquiera asimilar, que una etapa tan importante ha llegado a su fin.


Es raro pensar que ya no tendré que ocupar más mi uniforme escolar (descontando licenciatura y misa), que ya no tendré que peinarme ni sacarme los aros porque no corresponden; resulta casi imposible pensar que todo a lo que permanecimos atadas durante 12 años, ya no se utilizará más pues ahora tú te convertirás en la única dueña y responsable de tu vida.

Se hace una tarea tan complicada dejar atrás tantas vivencias, tantas penas y alegrías que inundan esta familia, dejar atrás la historia que nos unió un 3 de marzo de 1997, y finaliza un 21 de noviembre del 2008 y guardarla no como parte de un presente que algún día acabará, sino como el recuerdo de un bello periodo de tu vida donde formaste una gran familia con la cual creciste y te convertiste en lo que hoy eres.


Porque nuestra historia sería muy distinta si estuviésemos en otro lugar, o si no fuésemos las que somos, porque nuestra convivencia nos hizo únicas, nos hizo formar nuestro carácter, nuestro talento, nuestro estilo que no se lograría si las circunstancias fueran diferentes. Hemos crecido y madurado juntas impregnando un poco de cada una en la otra, dejando esas imborrables huellas que nos hacen ser lo que somos.


Mil momentos, mil historias… mil recuerdos son los que ahora nos unen, y, donde quiera que continuemos nuestras vidas permanecerá esa unión.


Quisiera decirles tantas cosas que se juntan en mi cabeza y no me dejan escribir con claridad, pero lo tratare de explicar de la mejor manera:


Las voy a extrañar demasiado, no quiero pensar que va a ser de mi… veo mi futuro, estudiando y siendo profesional, pero siempre presentes, porque las tengo grabadas en el corazón, con fuego, de tal manera que se les va a hacer imposible salir de allí. Independiente de cuán amigas hubiésemos sido, ahora forman parte de mi vida, de mi historia, hoy, gracias a ustedes, soy lo que soy. Gracias por ser las personas con las cuales compartí mis penas, mis alegrías, mis enojos, mis problemas. Gracias, porque de una u otra manera siempre estuvieron presentes demostrando que cuando se necesita, podemos ser una gran familia que da apoyo y consuelo. Son las mejores… y de verdad la mejor de las suertes a todas sin excepción alguna.


Formamos una gran familia, y como ésta “nunca te abandona ni te olvida” espero que sepan que siempre estaré aquí, no sólo para las cercanas, si no para toda la que en algún momento necesite una mano. La vida da tantas vueltas, que sin duda nos volveremos a encontrar.


De verdad fue un gusto compartir 12 años de mi vida con personas tan valiosas como son las que en el dia de hoy veo reflejadas a las niñas que fuimos alguna vez convertidas en mujeres que saldrán a enfrentar los desafíos de la vida, porque el juego… se acabó.


[Game Over]


Las quiero…


Paula ^^

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